Fabricación aditiva con pellets: ¿qué ventajas tiene?

La fabricación aditiva ofrece un sinfín de posibilidades, que empiezan antes de pulsar el botón de imprimir. De hecho, una de las primeras decisiones que debemos tomar al trabajar con esta tecnología es el material a utilizar. No siempre fue así, pero hoy en día esto nos lleva a la necesidad de elegir entre pellets o filamento.

Los pellets son pequeñas bolas de plástico del tamaño de un grano de arroz grande, mientras que el filamento es una especie de hilo continuo de plástico. Ambos se funden para fabricar un objeto capa a capa, pero las implicaciones de usar uno u otro son algo distintas.

Precisamente para abarcar muchas más opciones de fabricación, en ThinkIn 3D tenemos maquinaria que imprime con ambas materias primas. Pero como el uso de pellets en general es menos conocido, en este artículo nos vamos a centrar en este tipo de materia prima.

ThinkIn 3D tiene equipamiento de impresión 3D muy diverso
ThinkIn 3D tiene equipamiento de impresión 3D muy diverso

Una mirada al origen del material

Antes de nada, hay que tener en cuenta que el proceso de fabricación del filamento es más costoso porque tiene una complejidad y unos requerimientos de calidad que los pellets no tienen. Para poderse usar, el filamento debe tener uniformidad en el diámetro, lo que hace necesaria maquinaria y procesos de control de calidad añadidos.

Por otra parte, la impresión 3D a veces necesita una cantidad de material muy pequeña, y es por eso que muchos materiales que se usan en poca cantidad no se filamentan, porque hacerlo supondría un coste de producción elevado.

Así pues, inicialmente el uso de la impresión 3D estaba limitada a aquellos materiales que existían en formato de filamento, lo que suponía un inconveniente a la hora de abordar nuevos retos con esta tecnología. Con la incorporación del pellet, la fabricación aditiva permite trabajar con todos aquellos materiales que no existen en forma de filamento, y esto abre el abanico de posibilidades de impresión.

La agilidad gana terreno

Ya metidos de lleno en el proceso de impresión capa a capa, lo cierto es que los pellets tienen una ventaja añadida respecto al filamento. A diferencia de la impresión con pellets, que es un proceso continuo, al producir con filamento se trabaja con bobinas, por lo que siempre habrá un momento en el que será necesario cambiar la bobina de material.

La impresión con pellets también permite usar un material propio, es decir, que puedes fabricar usando los fragmentos de materiales que usas en los procesos de inyección (la granza). Los sectores que necesitan materiales certificados se benefician de esta ventaja, además de los que buscan investigar y desarrollar con nuevos materiales.

Impresora de pellets en ThinkIn 3D Mataró
Impresora 3D de pellets en ThinkIn 3D Mataró

Beneficios del uso de pellets

A modo de resumen, los principales beneficios de usar esta materia prima serían:

  1. Reducción de costes: dado que los pellets son un material más barato y fácil de conseguir en comparación con los filamentos, el proceso de producción mediante este sistema es más económico.
  2. Agilidad: también se reduce el tiempo invertido en la producción, puesto que, por norma general, los pellets se funden y extruyen a más velocidad que los filamentos.
  3. Versatilidad: las impresoras que utilizan pellets aportan una mayor libertad porque pueden usar distintos tipos de materiales. Además de la libertad que aporta poder trabajar con materiales disponibles en forma de filamento, pero con un componente diferente ya que podemos mezclarlos con otros para modificar sus propiedades. Algunos ejemplos son materiales flexibles con diferentes durezas (SEBS, TPU), poliamidas con diferentes cargas para modificar sus propiedades (fibra de vidrio o de carbono), algunos materiales cerámicos, y los diferentes plásticos ya conocidos como PP, PC, PLA, ABS, Nylon, PEEK o PEI.
  4. Rapidez: la impresión con pellets es un proceso continuo, al contrario que con filamento, que obliga a cambiar la bobina de materia prima en algún punto el proceso.
  5. Sostenibilidad: a pesar de que la impresión 3D ya aporta una reducción en el uso de materiales y en la generación de residuos respecto a técnicas tradicionales de producción, las impresoras con pelles van un paso más allá, porque permiten usar materiales a los que se les da una segunda vida como plástico reciclado.